Talleres atraviesa una etapa de reconfiguración dirigencial. En la antesala del segundo semestre del año y con las elecciones previstas para noviembre, el presidente Andrés Fassi reordenó su mesa chica con incorporaciones clave en áreas estratégicas del club.

La novedad más resonante es la llegada de Sebastián Fassi, hijo del actual mandatario, quien asumió como vicepresidente deportivo. Su rol será coordinar el área fútbol, tanto en plantel profesional como en inferiores, y formar parte de la toma de decisiones deportivas.

También se sumó Victoria Martins, quien ocupará funciones en el sector administrativo, fortaleciendo la estructura interna de gestión.

En tanto, Gerardo Moyano Cires, actual vicepresidente primero, continuará siendo CEO de la institución, aunque con un nuevo enfoque: se centrará en el desarrollo económico y la generación de ingresos.

Otro dirigente con peso en la nueva etapa será Ignacio Galloppa, vicepresidente quinto, cercano al entorno de Fassi. Tendrá un rol protagónico en el desarrollo de infraestructura: la construcción del nuevo estadio, la evolución del proyecto Mundo Talleres y la finalización de obras en el CARD serán parte de sus objetivos a largo plazo.

Estos movimientos internos llegan en un momento político clave para la “T”. En noviembre está prevista la renovación de autoridades, y Fassi aspira a una reforma estatutaria que le permita extender su mandato más allá del actual límite de tres períodos consecutivos.